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miércoles, 17 de febrero de 2010

continua la CHE serie de CHISTES, CHISTES, CHISTES !!!!!!

Una vez un hombre estaba leyendo el periódico y vio un anuncio que decía, "Se vende auto deportivo en excelente estado en US$ 500".
El hombre se sorprendió y de una fue a la dirección indicada para ver el auto. Cuando al fin encuentra la casa, encontró que era una mujer la que estaba vendiendo el coche. Ella lo lleva a verlo, y ve que es un magnífico Alfa Romeo en impecables condiciones y le pide probarlo para asegurarse de que está OK.
Lo prueba y ve que está todo estupendamente bien. A este punto ya lo estaba matando la curiosidad y le pregunta a la mujer:
- ¿Por qué está vendiendo semejante auto en sólo $500?
Ella muy complacida le contesta:
- Lo que pasa es que mi esposo y yo nos acabamos de separar. El me dijo que me podía quedar con todo menos el coche, pero que le hiciera el favor y se lo vendiera y luego le mandara el dinero...


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Despues de misa

Después de misa, una señora se queda sentada en una banca, llorando. El sacerdote la ve, se acerca y le dice:
- ¿Qué pasa, hija mía?
- ¡Ay, padre! Es que mi esposo falleció anoche.
- Eso es terrible en verdad. Dime, ¿dejó un último deseo o voluntad?
La señora se enjuaga las lágrimas con un pañuelo y responde:
- Pues sí, padre. Justo antes de morir, me dijo: "Por favor, baja esa arma..."


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Preguntando

Una familia está cenando y el hijo le dice al padre si puede hacerle una pregunta personal. El padre le contesta que sí:
- Papá, ¿cuantas clases de tetas existen?
El padre extrañado le contesta:
- Bueno, hijo, existen tres clases: a los veinte, las tetas de las mujeres son como melones: redondas y firmes; entre los treinta y los cuarenta, son como peras: todavía buenas pero un poco caídas. Después de los cincuenta son como cebollas.
- ¿Como cebollas?
- Si. Las mirás y te hacen llorar.
Este comentario enfureció a la esposa y a la hija, por lo que ésta dijo:
- Mamá. ¿Puedo hacerte yo una pregunta?: ¿Cuantas clases de penes existen?
La madre sonrió, miró a su esposo y contestó:
- Bueno hija, el hombre atraviesa tres etapas: a los veinte lo tiene como un roble: grande y fuerte. De los treinta a los cuarenta es como un abedul: flexible pero confiable. Después de los cincuenta es como un árbol de Navidad.
- ¿Un árbol de Navidad?
- Sí,..... completamente muerto y seco y las bolas son ¡puramente decorativas!


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Cena lujosa

En un restaurante de lujo se aproxima el mozo a la mesa donde está sentada una pareja y pregunta:
- ¿Que van a pedir señores?
El hombre responde:
- A mí me pone una langosta Thermidor y un cava Juve & Camps reserva de familia.
- ¡Excelente decisión!... ¿Y su señora...?
- A mi señora mandale un fax y decile que la estoy pasando bárbaro...


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Frígidas

Dos amigos charlaban acerca de la esposa del primero:
- ¡No se qué hacer che!, ya no logro excitar con nada a mi mujer, y ¡ya lo he intentado todo!
- Mirá, a cada mujer hay que excitarla de forma diferente, pero hay algo que a todas sirve por igual: Los aromas.
- Y eso como es?
- Hoy llegá lo más tarde posible a tu casa, para que tu mujer esté dormida; con mucho cuidado, levantás las sábanas y metes la mano en medio de sus piernas. Después, te pasas la mano por el rostro, para que se impregne de su aroma, ¿me entendiste?
- ¡Sí!, no hay problema.
Esa noche, casi en completa oscuridad, el señor sigilosamente se mete a la cama y con la delicadeza que la misión amerita, introduce lentamente la mano por entre las piernas de su esposa, acto seguido frota con intensidad su rostro y se aproxima al oído de su amada.
- ¿Mi amooor...?, ¿mi chiquiiita..?
La mujer solamente cambia su posición, pero sin despertar. Nuevamente el animoso esposo, repite la operación, pero ahora con más intensidad.
- ¿Mi cuchi-cuuuchi..?, ¿mamiiita...?
Esta vez la esposa lentamente despierta y con un pesado movimiento enciende la luz de la lámpara. Se queda viendo unos segundos fijamente a su esposo y exclama:
- ¿Y ahora...?, ¿quién te rompió la cara?







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